Planté la
casa sobre el plano inclinado
de la
sierra
el patio
sube hacia el este y
se resbala
por los lados
es cansador
llegar al cedrón de la esquina
pero se
baja liviano hasta la madreselva
yo quería
un hogar siempre quise todavía quiero
tiene
muchos defectos la casa
como un
adolescente desgarbado
se alarga
se tuerce se enajena
no respeta
líneas rectas ni verticales aplomadas
carece de
estilo, engorda en la cintura y
el frío le
pega en el costado
hay lugares
absurdos en la casa, sitios que nadie habita
rincones
que esperan
y esconden
o guardan
objetos que
no se encuentran
ni se
buscan
ni se
recuerdan
y me tiene
a mí la casa
desplegando
trajines circulares
que ocupan
horas y no cambian nada
y tiene una
manada triangular de perros
y muchos
árboles y un par de peces
esta manera
de pasar inviernos tiene
como
esperan los niños el cumpleaños
en un
tiempo que no pasa nunca
encerrado
detrás de las ventanas.
Sobre un
tobogán de gramilla y piedras
mi casa se
desliza
como un
barco que vuelve.
© Irene Scalabrelli
¡ Gracias Gustavo! Que tengas un bello 2020. ¡Te abrazo!
ResponderEliminarPrecioso poema, Irene, felicitaciones!!! 😘😘😘
ResponderEliminarIrene! La naturaleza te envuelve y baila en la belleza de tus palabras! un gusto leerte! Abrazo grande y que sea un buen 2020! Alfredo Lemon
ResponderEliminar