LUZ EN LA AMERICA PROFUNDA
Luz de los Andes en libertad
protector de sueños
de la América profunda
me invita en sobresuelo.
Heridas por asfaltos impiadosos
mis desprolijas alas urbanas
intentan expandirse.
El cóndor pasa,
sangre viva de la América parda,
el cóndor me espera.
Cóndor-guía
me vuelves temeraria.
Despliego el buen camino…
Ahora
estallo en viento
¡Que nada nos detenga!
© Nora Coria
Muy bueno! Abrazo.
ResponderEliminarHola Nora: es así"¡que nada nos detenga!". Está todo dicho en ese "estallo en viento". Fuerza y sentimiento en tus palabras. Te felicito Irene Marks
ResponderEliminar¡¡¡Hermoso y lleno de fuerza, tu poema, Nora.
ResponderEliminarTe robo el cierre y lo hago ruego: "¡Que nada nos detenga!"
Un beso grande
María Rosa León