hurgar el meridiano en la carroña
para apenas rozar bordes
cubierta de esquirlas
desatando heridas
siguiendo paralelas
hasta topar con la meta
de una aguja invisible
allí
herir
como verbo que no perfora
solo exime eclipses
en el martilleo de los cuerpos
© Gladys Cepeda
Mil gracias Gustavo por tan hermosa publicación un abrazo
ResponderEliminarqué belleza metafórica!!! felicitaciones Gladys.
ResponderEliminarMuchisimas gracias Isabel un cariño grande
ResponderEliminarCertero como puñal!!!!
ResponderEliminarHasta la empuñadura!!!
ResponderEliminarHasta la empuñadura!! Bello Gla!!!
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario y por leer mi poema cariños
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