de lejos vienen los recuerdos
una casa grande
padres abuelos hermanos
y la confusión
siempre la confusión
caminando mi desamparo
las órdenes incomprensibles
prohibiciones y cerrojos
caían como lobos de presa
tuve la orfandad de saberme inocente
mi pequeñez cabía entre los dedos
la soledad dibujaba en mi cintura
signos incomprensibles y quietos
muertos desordenados
y solos para siempre
entonces crecí para adentro
no había opción
las palabras dolían como peces voraces
acomodaban espacios de silencio
y ese permiso para vivir
dibujando mis ojos ciegos
la infancia
© alba estrella
gutiérrez
GRACIAS SIEMPRE
ResponderEliminarPOR LA PALABRA Y EL AFECTO
UN ABRAZO PRESENTE QUERIDO GUSTAVO
Y POETAS DE LA PÁGINA
ALBA
querida hermana...en tus espacios de silencio florece siempre la palabra necesaria...abrazo!!!!
ResponderEliminarEsa infancia que duele, que no entiende las reglas impuestas y los adultoa que no recuerdan su propia infancia; poema que invita a pensar, me gustó.
ResponderEliminarUn abrazo.
Betty
Hermoso poema. Refleja la orfandad en que todos crecemos, a la intemperie de la inocencia. Me conmovió. Un beso grande. Adriana Dirbi Maggio
ResponderEliminarHermoso poema querida poeta
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