¿Te
preguntaste acaso Claudia por dónde el dolor nos entra al cuerpo?
digo- si te
lo preguntaste quizá alguna vez antes del cáncer o durante
mientras
las alucinaciones de la Morfina te llevaban
de un punto
fijo a cualquier parte
cuando la
lengua te bailaba dormida entre la boca y la habitación
se llenaba
de alimañas innombrables
cuando
tampoco el venenito amargo te calmaba el hueso
y su hambre
por tu pobre vértebra extenuada
¿te
preguntaste entonces acaso por dónde el dolor nos entra al cuerpo?
porque a mí
el dolor por tu cuerpo me entró temprano
furioso y
desbocado por el pecho como un dardo prendido fuego
y desde ahí
arrasó sin ninguna piedad como un golpe de mangual
sobre los
campos / la casa/ los nombres y todas las mañanas
ahora yo
camino con tus pies
me arrastro
con su peso buscando lugar entre mi cuerpo
día y noche
ando a tientas con el animal oscuro avanzando por mi sangre
lo escucho
gruñir y acomodarse
cuando el
hambre lo apremia roe un poco el hueso
y entonces
el cuarto vuelve a llenarse con los insectos de tu sueño
un río de
cobalto anda brotando enloquecido de mis venas
de tanto en
tanto cuando desboca amenazante
la pequeña
bestia amaina conmovida
entonces yo
pobre ignorante con la lengua ardida
como vos me
doy de beber licor de adormidera
y no hago
otra cosa que recordar y preguntarte
¿por dónde
el dolor nos entra al cuerpo?
© Sandra “Tana” Pasquini
Ay, Tana Tana, qué voz poética maravillosa, cruda, honda
ResponderEliminarFortísimo poeta¡¡ muy bueno¡¡
ResponderEliminarSonia Rabinovich
tana, te leo, te releo y me digo que para mí, pocas personas escriben como vos al definir el dolor, ese latigazo indefinible. me cala, me derrumba tu poema bellísimo en su hondura. abracito querida. susana zazzetti
ResponderEliminarCómo siempre... un doloroso y tan bello poema
ResponderEliminarEXCELENTE POEMA. Un abrazo Isabel Llorca Bosco-
ResponderEliminarHermosura tu palabra.
ResponderEliminarSublime poema, con la fuerza del que resiste y se ubica con piedad infinita en el Otro adolorido, con la belleza conmovedora del desgarro. Felicitaciones, Tana, poeta extraordinaria!! Abrazos!!!
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