Poema de Clelia Bercovich
EN EL MERCADO
A Cristina Zurutuza
Santiago de Chile. 1986
Pensando siempre en el poema,
se
me ocurrió que los esquimales
tienen cuarenta palabras
para
nombrar los estados de la nieve.
Las inventaron en la molicie blanca. En el blanco puro.
Hablaban
de color , de brillo,
en un estricto silencio.
Aunque te llames poeta, el poema,si no
es, no te mirará a los ojos.
No lo hará, ni aún hayas ingresado a una zona tabú en la
que se revelan
todos los secretos.
De nada sirve si no te alcanza el misterio
Si no te derriba algún dolor. Ni aún con
eso.
Son inútiles las lágrimas’ on the rocks’
Lágrimas
sobre el hombro de los impávídos,
los
extranjeros del amor.
Ellos, ellos son los verdaderos
muertos. Los impávidos.
Huye
ya.
Ellos
muerden toda la fruta sabrosa del
sur, mientras sacuden de su saco
el agua caliente de tus ojos.
Lirio del campo, girasol que muta, violeta
escondida.
Sólo aprendiste a resistir, con
extraña paciencia.
El
miedo de caer de algún andamio
(
como un joven obrero que ese dia
empezaba a trabajar.)
O
de alguna higuera
( que eso te va más)
‘’ Santo Padre,´llévatelo’’.
Yo no sé de Papas.
Eso
decía el muro el muro aquella mañana,
con letras enormes.
El
muro que rodeaba al cerro en Santiago de Chile
. Él lo escaló.
En
el Mercado,elegíamos un ‘’loco zapato’’
Qué
umbrío el bosque con el rumor del río
Vino blanco seco
Y un fragante té de cedrón.
© Clelia Bercovich
3 comentarios:
Muy bello y profundo poblado de imagenes Me encantó
bello clelia, impactantes imágenes. honda reflexión. abracito. susana zazzetti.
GRACIAS YO LAS ADMIRO
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio