Sarita Montiel
Aquí dejo mi huella
con mis pasos me voy.
Dolores Castro
Saratísima, te has ido.
Queda tu imagen bella,
tu voz de seda,
tus ojos majos
pintando
el aire,
tus flores perfumadas
en el ojal de los amantes
del
último cuplé
de
tus zapatos.
Te llevas todo
y todo al mismo tiempo
dejas
empeñado en tu voz:
“siempre viva” germinando.
Llevas tu relicario,
tu pasión, tu garbo,
llevas también mi adolescencia ,
en este “lunes abrileño”
cuando me entero Sara
que ya te has ido.
Te llevas tus pasos,
Maja, pero tu huella
dejas.
Saratísima,
para ti
un ramito
de violetas.
© Carmen Amato
Refrescante poema para una grande.
ResponderEliminarUn abrazo.
Betty
Un homenaje repleto de imágenes muy vividas , gracias por compartir 😍
ResponderEliminarVolví a la niñez!
ResponderEliminar"Como aves precursoras de primavera
en Madrid aparecen las violeteras
que pregonando parecen golondrinas
que van piando, que van piando.
Llévelo usted señorito que no vale más que un real
cómpreme usted este ramito
cómpreme usted este ramito
pa' lucirlo en el ojal."
Gracias por compartir. Tere Vaccaro.
Un bello retrato poético!
ResponderEliminar