Otra refalosa
A Hilario Ascasubi
Dicen que esa noche la luna
hablaba
y contó
que los abuelos
también habían sido esclavos.
Dicen que caminaban Glorioso y su padre
buscando
la fosa
que habían cavado al amanecer
en la
hora del sol
cuando
anunciaba
nudos de tiento y de mazorca.
Eran dos ánimas
las
víctimas de Hilario
con un sablazo dibujado
en
sus pechos.
Habían estado colgados
del
árbol triste
y dicen que resbalaban en un charco rojo
y que lamieron su sangre
la
propia. De bruces.
Lenguas saladas chorreando.
El pardo liberto de
los abuelos esclavos
sonrió.
¿Con enojo
unitario?
Y luego cortó cueros
húmedos.
Y entonces ellos
gatearon la noche buscando
una luna ignota
que hablaba
y dos fosas
a la espera.
© María Marta Donnet
Excelente poema que latiga con saña duele hasta el meollo.
ResponderEliminarMichou Pourtale
Cuantas bellaS imagenes. Muy bueno besos y abrazos
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