VOCES 
Quizás sean 
más elocuentes los silencios.
No hay duda que la fuerza de un beso, 
un abrazo, una caricia, 
supera la significación de mil palabras. 
Es innegable que 
los susurros y los suspiros 
llegan a lo más profundo 
del corazón. 
Pero ¡cómo me estremece 
que me llames querida 
y que me regales 
un simple te quiero!
© María Rosa León

Esas verdades que de tan sencillas, cotidianas, se vuelven invisibles...
ResponderEliminarClaudio Simiz
¡Mil gracias, Claudio, por tus palabras de afecto y aliento!
ResponderEliminarUn abrazo grande
María Rosa León
Magnífica manera de sublimizar el "te quiero".
ResponderEliminarEste poema se lee, se disfruta y se guarda en el corazón.
Feliz 2018, María Rosa.
Betty
David Sorbille dijo...
ResponderEliminarExcelente poema, Rosa Lía!! Un abrazo
Puro sentimiento mujer!!
ResponderEliminarmaravilloso poema!!!!!!! queda expuesta tu tremenda sensibilidad!!!! me encantó!!!! gracias por compartirlo!!! un beso, francisco
ResponderEliminar¡Gracias Francisco por tu timpo de leerme, por tus palabras llenas de afecto y por tu beso que retribuyo
ResponderEliminarMaría Rosa León
¡Muchas gracias Betty por tu lectura, por tus palabras y por tu afecto siempre. Viniendo de vos, el elogio es doblemente apreciado.
ResponderEliminarUn beso grande
María Rosa León
¡Mil gracias, Nerina y David por su presencia y su afecto de siempre
ResponderEliminarUn beso grandeçMaría Rosa León