4/11/17

Poema de Susana Zazzetti


ya lo sé.
entiendo.
ya lo entiendo.
se muere la tarde
sin remedio.
se muere el hombre
y se mueren tambien las cosas.
pero

¿ a qué hora resucitan
las palabras?



© Susana Zazzetti

23 comentarios:

Blogger Marta Raquel Zabaleta ha dicho...

Precioso.

4 de noviembre de 2017, 14:32  
Blogger Noemí Correa Olivé ha dicho...

Ingenioso, querida Susana, un enigma, desde lo ínfimo hasta lo inconmensurable, en pocas palabras. Abrazos!!!

4 de noviembre de 2017, 15:38  
Anonymous betty badaui ha dicho...

Oh, Susana, qué pocas palabras para llegar a tanta hondura, es gratísimo encontrar tus letras y entrar en ellas.
Un abrazo
Betty

4 de noviembre de 2017, 22:45  
Blogger Adriana ha dicho...

Muy bello. Poética pregunta que devela la pasión por la palabra. Me gustó mucho. Un beso grande. Adriana Maggio (Dirbi)

5 de noviembre de 2017, 0:25  
Anonymous María Marta Donnet ha dicho...

Bellísimo Susana !!! Gracias !!!

5 de noviembre de 2017, 2:50  
Blogger Liliana ha dicho...



A qué hora no? y con tanta muerte rondando.
Abrazo Susi

Lily Chavez

5 de noviembre de 2017, 9:21  
Blogger graciela barbero ha dicho...

El atardecer es la hora en que nacen todas las sensaciones pero las palabras nacen siempre. Muy bello. Un abrazo Graciela Barbero

5 de noviembre de 2017, 9:24  
Blogger Elisabet Cincotta ha dicho...

Vengo leyendo el blog, sus poemas, y me emociono, este me hizo lagrimear. Bello

Abrazos
Elisabet

5 de noviembre de 2017, 19:45  
Blogger Graciela Corrao ha dicho...

Ahora

6 de noviembre de 2017, 9:01  
Anonymous Anónimo ha dicho...

David Sorbille dijo...
Elocuente poema en el que todos nos vemos reflejados. Un abrazo

6 de noviembre de 2017, 14:14  
Blogger María Sonia Quevedo Hoyos ha dicho...

Cuanta belleza... conmovedor poema. ¡Gracias!

6 de noviembre de 2017, 15:53  
Blogger Unknown ha dicho...

Que poema tan bello,como un atardecer en llamas,un abrazo,


Silvia Loustau

7 de noviembre de 2017, 15:30  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Hermoso. Inquietante. En tu caso, apenas al alba tras la ventana que te deja ver el vuelo de los pájaros, cada día, aun en el silencio todo tuyo, con la vida en la boca. Abrazo! Te quiero

7 de noviembre de 2017, 23:11  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Buenísimo. Diferente. Griselda Rulfo

9 de noviembre de 2017, 11:36  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Mi querida amiga,gracias por este poema que me nos lleva a la certeza de la finitud, pero con una luz en la palabra que, escrita, no muere.
Un gran abrazo
Juany Rojas

10 de noviembre de 2017, 23:49  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Qué maravilla, Susana. ! PARA MÍ RESUCITAN CUANDO ME VIENEN A LA MEMORIA Y BUSCO LA PALABRA QUE ERA.otras morirán sin remedio, pero resucitarán a la mañana. O COMO DICE bORGESE PERDERÁN COMO TODO SE PERDER bESIos nsabel

13 de noviembre de 2017, 14:15  
Blogger Leonor Mauvecin ha dicho...

Gracias Susana por este bello poema , gracias porque en él resucitan las palabras .

13 de noviembre de 2017, 20:01  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Susana, pienso que en el silencio de la noche resucitan las palabras, ellas son las que entrelazan sueños, gracias.
Michou Pourtalé

14 de noviembre de 2017, 15:46  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Gran enigma.

Maria Cristina Fervier

15 de noviembre de 2017, 0:57  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Siempre están resucitando !
Camino a la palabra (tríptico)
II
En hora de silencio
me aferro a la escritura.

Tengo necesidad
de hacer un puente de emociones
y conjurar con ellas el poema.

Palabras,
esas que caminan por la vereda,
entre la escuela y la tiza,
entre la arena y el mar,
entre tu idioma y el mío.

Va abrazo. Tere Vaccaro.

16 de noviembre de 2017, 22:31  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Hola Susana: contundente el final, como una llamarada que se opone a esa muerte que nombrás con aguda lucidez existencial. La imagen acompaña este poema que me traspasó. Lo disfruté mucho Irene Marks

20 de noviembre de 2017, 11:16  
Anonymous Anónimo ha dicho...



Es un poema que susurra una evidente verdad. Me encantó.

Un abrazo grande,

Alicia Márquez

3 de diciembre de 2017, 16:47  
Blogger Marta Ortiz ha dicho...

afortunadaamente, las palabras tienen el poder de resignificarse. Gracias por el poema. Abrazo, Marta Ortiz

9 de diciembre de 2017, 20:54  

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