HEMORRAGIAs
a mi
querido cumpa, Julián Bastías
Con menstruación permanente
dibujaba todo el espacio
de las torturas
¿Pensaba
que la vida
se esfumaría así, rápidamente?
El cabo cuando me llevaba al baño
se paró y me gritó:
-¿Es posible que usted sea la Sra.de Hinrichsen?
Pude haberle respondido
-Sí, mi cabo.
Pero callé.
Al orinar, la sangre
se arrebató en borbotones
y le ensució las botas.
-Conteste,
hija de puta,
aulló entonces
Y fue su culpa
por no dejarme a solas.
Mi vómito le ensangrentó el bigote.
© Marta Zabaleta
Foto de Yanina Hinrichsen
Excelente. No víctimizada sino en pelea y en poema.
ResponderEliminarmuchas gracias, Susana. No nos conecemos, pero me has emocinando con tu reflexión.AEres muy intuitiva!...Abrazos. La foto es de hija..la saco en Londres.
ResponderEliminarme duele en la sangre, como si lo hubiera vivido. y sin rencor, ese estarse con el compromiso a cuentas, sabiendo que la lucha sigue en la palabra. abrazo queridísima. y otro para yanina. la imagen es brillante. susana zazzetti.
ResponderEliminarMuchísimas grcias, Susana, por tus generosas palabras, y més en especial, por tu saludoa a Yanina, una matemátcica que también,es artista.
ResponderEliminarArazos, Marta
Querida Marta:¿qué puedo decir de este dolorosísimo poema, testimonial, contundente? Que duele en el alma, que nos hace partícipes de hechos horrendos y a la vez dignifica a quien lo escribe. Excelente la foto que lo acompaña. Con cariño Irene Marks
ResponderEliminarQuedo profundamente agradecia por tu certero comentario. Estos recuerdos hablados ayudana a expurgar las penas.La foto es una metáfora; la tomó mi hija,Ella también fue víctma del mismo proceso, cuando era una beba.Abrazos y gracias por tu atencion. Siempre,Marta
ResponderEliminarQuerida Marta, sos una gran poeta.el poeta transformar el horror en memoria poetica,te abrazo,
ResponderEliminarSilvia Loustau