PARTIR.
¿Qué
pájaro afuera canta, amor mío?
¿Es la
mirla o la alondra o el zinzontle?
¿Qué
pájaro es aquél que afuera canta, amor mío?
No es
nada. Es sólo tu voz que sopla en mis oídos.
¿Qué
color dejó la tarde en mi cerebro?
¿Qué
escuchó mi alma la última noche?
¿En qué
límite del dolor se rompió mi corazón?
No es
nada, hermana mía. No es nada.
Es sólo
tu voz que vuelve con mi voz.
© Carlos
Satizábal
Me encantó, palabras llenas de ternura y metáforas de amor...
ResponderEliminarHola Carlos: tu lirismo nos va llevando a través de las preguntas sin respuesta en un ritmo melancólico. El dolor redimido por la poesía, el amor más allá de la muerte. Excelente Irene Marks
ResponderEliminarPrecioso!
ResponderEliminarPrecioso poema, cuanta soledad y casi frío se percibe; llora el momento. Muy hermoso.
ResponderEliminarHermosa musicalidad que atempera el dolor. Muchas gracias Carlos!!! Raquel Jaduszliwer
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