Despedida
El sol en la madera de la mesa.
El sabor del vino elegido.
La música de esa tarde de mayo.
Creer que estás aquí
mientras avanza la noche
con su llama rojiza,
alerta ante tus ojos cerrados.
El beso leve en tu frente.
Los gritos de mi silencio.
Tu inconsciencia en un escenario
de paisajes azules.
La soledad más pura entre mis manos.
La despedida sin palabras.
El dolor que se expande
en mitades irreconciliables.
Y la ausencia, ese sendero ingrávido
donde una niña llora su desconsuelo
en la profundidad de mis entrañas.
© Beatriz Minichillo
Sensacionales los tres versos finales.
ResponderEliminarAbrazo
Elisabet
Brutal, sólo un poema puede hacer tan bello el dolor. Gracias
ResponderEliminarCuantas imagenes de momenos y sueños. Hermoso.
ResponderEliminarBeatriz el desgarro en el poema lo veo expresado desde los versos de su inicio, en poético descenso me lleva hasta el sendero donde una niña llora su desconsuelo. Así tu niña interna se deshace en una simple lágrima herida. Excelente tu poema y gracias.
ResponderEliminarMichou Pourtalé
Gracias a todos por sus comentarios
ResponderEliminarEl beso leve en tu frente
ResponderEliminarLos gritos de mi silencio
En estos versos pude sentir toda la esencia del alma del poema
Alguien utilizo la palabra desgarro, así se siente
Patricia Corrales
UN DOLOR QUE SE EXPANDE Y SE HACE LUMINOSO
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