El mundo por el medio
La tarde se vestía de amarillo rabioso en la vereda,
había un aire de sábado a la noche,
danzando en el espacio inmóvil
desde mi asombro amanecido
a su perfil prepotente.
Yo andaba enredado en las orillas de mi infancia,
donde hasta el gris es luminoso
de puro descubrirlo.
Ella vivía un verano desatado
entre sus piernas de mujer y ojos de niña.
Hubo el fulgor antiguo de un relámpago,
que me partió el mundo en dos mitades
desproporcionadamente iguales
Fue intuirla y perderla en un mismo sonido.
Al dar vuelta la esquina.
me quise acomodar la adolescencia,
tonto y solo.
como un gorrión en la tormenta.
© Rubén Amaya
maravilloso. tierno. emotivo. vivencial. un lujo, como la imagen ¡ qué complemento!! susana zazzetti.
ResponderEliminar"como un gorrión en la tormenta" Bello
ResponderEliminarfloralevi
Qué bueno. Hermosas imágenes para compartir emociones. Me gustó mucho. Adriana Maggio (Dirbi)
ResponderEliminarQué bonito!!! Felicitaciones.
ResponderEliminarMarta la Rosa
Luminoso poema, tan cercano a esa etapa de la vida donde domos posibles y casi eternos. Bello, poeta! Fabiana León
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