OSADÍA DE LOS PÁJAROS
En la desmesura de la tarde
sólo un ave.
Y yo,
en la piedra.
Una congoja huésped
me convence
de que árboles y vientos
me obedecen
Un ave golondrina de la tarde.
Mancha movediza y elegante
en abuso de su vuelo
un
despliegue del Sí Mismo
desvergüenza
de las alas
libertad
desgarradora
Todo espacio Todo espacio
Todo aire Todo vuelo
Y yo,
en la piedra.
Paradoja tangencial
acrobacias
de pájaro insolente
un
ave en dominio de su cuerpo
un
insulto a mi quietud
y a la arquitectura que me estrecha
Metáfora de virus,
un
guiño golondrina
de
pronto invade el desparpajo de la tarde,
orienta
la veleta de mi gárgola
y
contagia la fiebre de su vuelo
atrapándome en su vórtice
y a pesar de la náusea
y los
delirios matinales
creados
por ausencias
armo un esqueleto con mis huesos
y despego.
© Noemí Correa Olivé
Por sobre todo volar, no dejar nunca de volar.
ResponderEliminarBello vuelo el tuyo Noemí querida.
Abrazos.
Tana Pasquini-
Sí, Tana, vos sabés del rearmarse y volar, volar... Gracias, poeta, abrazo!!!
EliminarCuanta hermosura, ese despegue, gracias, alicia pastore
ResponderEliminarGracias, Alicia! ❤❤
EliminarMe encantó Noemí, gracias!MARÍA CRISTINA DI LERNIA
ResponderEliminarGracias, Ma Cristina!!! Besosss ❤
EliminarTiene todo: comparaciones, sutilezas y un vuelo en los versos que deslumbra.
ResponderEliminarAbrazos.
Betty
¡Muchas gracias por tu lectura y tu comentario, Betty!! ❤❤
Eliminarbello!!!! buen vuelo!
ResponderEliminarabrazo
claudia
¡Gracias, poeta!!! De eso se trata, verdad? ¡Del vuelo!! ❤
EliminarGENIAL!! Belleza en este re-armarse cotidiano para enfrentar el día.
ResponderEliminarAbrazo
Elisabet
Gracias, Elisabet, por tu lectura y tu comentario!! Abrazo! ❤
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