Réquiem para una niña perdida
Cuándo te volveré a encontrar
niña del crepúsculo,
de azaleas y jazmines
perdida en un rincón del tiempo.
Qué sola estás,
qué ausente de tu propia imagen
rolando en un barco
sin vela ni timonel
con tu mudo pedido de socorro
mientras languideces
como una figura opaca
en un escenario de cartón.
Dónde estarán ahora
tus manos
esas que se escapaban
como pájaros inquietos.
Dónde se fue tu hora
que barría el aire de la siesta.
Dónde tu mirada,
luz en la sombra.
Con vos se fue el espejo,
el reflejo, el instante
y no quedó nada
sólo esta ansiedad
teñida de vacío
que me deja aún
más desnuda
con un interrogante
sin respuesta
arropado en mis brazos.
© Beatriz Minichillo
absolutamente conmovedor. susana zazzetti.
ResponderEliminarQué descripción maravillosa. Un vacío tan lleno!!
ResponderEliminarGracias Susana y Nerina por sus comentarios
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