Poema de Amalia Zacoutegui

PARA SER DIGNA DE SER

Para ser digna de ser
será  el coraje de este amor por lo partido,
su embravecido mar
que empuja con su oleaje
hacia otra luz.
Adheridos aún pétalos negros, ese hipnótico réquiem de los días,
serán polvo y habrá por cada huella
un resabio de cenizas esparcidas.
Te llamo, viento poderoso, a mi costado
con angustia, ronca la voz, la persistencia,
para que descorra velos el pacto del origen,
el posible amor iniciando travesías,
los anhelos sofocados golpeando sin destino,
la alegría, esa flor escondida
mientras  el pánico cerraba los postigos.
Te invoco, viento,
padre de quien suspira,
para que dance en torno a mí tu remolino:
en cada tembladeral de sombras
la lumbre del sueño que recién ha  nacido.
Tu soplo desovilla tempestades,
agitará  en mi cuerpo las semillas dormidas
de esos otros nombres que intuyo y que bendigo.
Para ser digna de ser
yo me entrego a tu abrazo:
faro que hiende la negrura y le arranca
pájaros de fuego
a lo desconocido.

© Amalia Zacoutegui