POETA
Cuando las cosas marcan
hay un fervor de réplica
que como púas borrachas,
salta pleno de luz...,
lunar y enamorada.
Somnolencias del alma que ilumina..
Entre todo, resaltan...,
huellas vivas de bondad o impostura,
miedos y
vidas póstumas.
La mirada se aleja
balanceando una hoja en el silencio.
Ese silencio blanco del papel,
aún virgen, impoluto
que alguna
vez simula,
escritos simultáneos con trazos de fantasma.
Parecería arbitrario olvidar el estilo,
crear
salvajemente, sin certezas.
La verdad relativa de la musa,
recurrente demuele límites anunciados,
para no componer...
un
algo en desconcierto,
un mero ilusionismo de palabras.
© Antonio Cristóbal Pourrere
ResponderEliminarla creación surge espontánea, más allá del oficio del demiurgo.
Muy bien
Walter Mondragón
El eterno litigio entre la preceotiva, la técnica y la inspiración. Nunca mejor planteado que en tu poema, Antonio.
ResponderEliminarAplausos, bises y un gran abrazo
María Rosa León
Sin duda una bella reseña de la obra del escritor, gracias por sentir y gracias por plasmar toda tu creación en este poema tan precioso. Besos Alicia.
ResponderEliminar