Andan diciendo.
Andan diciendo en mi pueblo
que un torrente de agua
se acerca para limpiar las almas quejosas.
Habladurías
como suele suceder por estas costas.
Lo tan anunciado
fue la llegada de un pájaro azul resucitado
desde el barro.
Alas pesadas
pecho inflado
en una esfera amarilla mustia
vacío de plumaje.
Pero aun grita aquellos trinos
de pajarraco mandón.
Entonces todos a sus puestos
acatando orden, patria, silencio y hogar.
Anunciaron su arribo como una bendición
quizás por las últimas gotas
de cauce viejo.
Ave acuosa devorándose en su propio nido
hasta que alguien reaccione y advierta
que el viejo pájaro azul
tiene vuelo raso
come, caga, duerme
nos canta las cuarenta
y ni con diez mil silbatos
nos hará callar.
©Alicia Corrado Mélin
El que vuela bajo termina estrellándose, poeta. Alimenta su propia corrupción en tanto pulgón como lo habita. Gracias por tu palabra!
ResponderEliminarMardel hace rati dejo de ser la ciudad feliz y estos ultimos tiempos estuvo naziendo una fachada nueva. Y este pajaron azul verdoso esta a la cabeza... Pese a todo nos las arreglamod y donde podamos los descompondremos
ResponderEliminarCallar nunca!!! besos ALy.
ResponderEliminar¡Maravilloso Alicia!
ResponderEliminarPajarracos hay por todas partes, por acá, también. Y hay que seguir nuestro propio canto, bien fuerte.
Un abrazo,
Alicia Márquez
Al árbol que crece torcido se le caen los pájaros. Este no tiene ni raíces. Bello Aly!! Abrazo
ResponderEliminarLa palabra en el filo del aire vuela y corta retazos de un viejo mantón con encajes y puntillas, entre mujeres de un pueblo ya descalzo. Hilván de cielo el canto. Ellas saben caminar. Lindo Aly, Beso.
ResponderEliminarEs voz de protesta que circula. Un gran poema.
ResponderEliminarBellísimo!!!!! Siempre leerte es un gran placer. Abrazo
ResponderEliminarCynthia Rascovsky