Poema de Teresa Gerez
IRONÍA
“Sean
eternos los laureles/que supimos conseguir”
Elegí la
mortalidad
no los
laureles
se los dejé
a Dafné
que
escapaba de los dioses
Yo me dejé
alcanzar
y con una
vuelta de llave
fui valija,
tren, aeropuerto
trébol de
cuatro hojas
Otra vuelta
de otra llave
me
descendió al reino animal
Y fui
lujuria
Puro
dolor/sangre
Después me
evaporé
y fui nube
Pronto
devine tormenta
Relámpago /
truenos
Un rayo me
devolvió al suelo
en cenizas
justo
cuando me estiraba en árbol
Finalmente
me volví tinta
tinta tinta
tinta tinta
para
escribirme mejor
y escapar
del juego
de los dioses
y
convertirme – aunque más no sea-
en una
hojita una ramita
de laurel
© Teresa
Gerez
7 comentarios:
usás una de las palabras más hermosas para nosotros: tinta.¡¡ y la dulzura del final!!. susana zazzetti.
Tere:
Hola! Intenso y profundo tu poema. Nos convertimos en tantas cosas y siempre atravesados por la tinta. Gracias por compartirlo. Abrazo
Gracias, Gus. Gracias chicas por sus comentarios.
Es verdad, Teresa. Esa metamorfosis y finalmente describirnos y escribirnos con esa tinta que nos recorre. Y me hago una pregunta adicional: ¿cuánto quedó de aquella que fuimos originalmente? ¿importa, acaso?
Me gustó como está dicho tu poema, también.
Beso, Teresa.
Hermoso poema con un final que perfuma.
floralevi
Qué bello, hermana!
Muy hermoso, Teresa. Me encanta el tema y cómo fuiste desarrollándolo poéticamente, volcando tu mirada original. Me gustó mucho. Un abrazo. Adriana Maggio
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