TÉ PARA DOS
Dos tazas blancas sobre la mesa,
dos cigarrillos y el diario de ayer.
Ella quiere que escuchemos a Los Beatles.
Penny Lane, insisto yo,
trae alegría.
No. Campos de Frutillas
para siempre, dice Claudine.
-¿Para quién?
-Para siempre.
Nada es real, dice,
acostando sus manos sobre el mantel.
Y un sol oblicuo
perdiéndose en la tarde,
mientras las horas
se inclinan de color té.
© Silvia Arazi
"acostando sus manos sobre el mantel."
ResponderEliminar"acostando sus manos..."
(¡!)
R.
Qué linda manera de hacer eterno el momento! Muy lindo
ResponderEliminarGracias!!
hermoso. imágenes que impactan. susana zazzetti
ResponderEliminarUna escena, un momento, la perpetuidad de un recuerdo. Bonito Poema. Abrazos
ResponderEliminarRosa Lía
Bello y sutil. Tierno y cóplice. Muy bello poema. Abrazo. Antonio Pourrere.
ResponderEliminarHERMOSA TARDE QUE NUNCA ACABA BESOS MARIA LUISA MARQUEZ
ResponderEliminar"...para quien...para siempre" "nada es real" muy bueno! Un abrazo, Dolores Pombo
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