para mudar mi casa
no me quedan
uñas
tantas casas y más casas
y más casas y casas con cajas con cosas
en mi casa de ahora que mañana no
no sabía que no era para siempre
y nada duraba y nada se quedaba en las casas no
no sabía nada de eso entonces cuando creía
cuando creía que nada dejaba de ser que nada dejaba
de estar que nadie dejaba
que nadie se mudaba de una
que nadie se mudaba de una casa
que nadie se quedaba sin uñas
que siempre crecían nuevas
capaces de agarrarse fuerte de las paredes
a Susana Thénon
© Nilda Barba
Gracias, Gus!!!!
ResponderEliminarfuerte visión de un difícil momento, lo indescriptible, de lo que fue.
ResponderEliminarMe conmovió, muy buen poema, un abrazo,
ResponderEliminarSilvia Loustau
David Sorbille dijo...
ResponderEliminarQuerida Nilda: Un poema que estremece! Un abrazo
Desolación... Pero las uñas CRECEN!
ResponderEliminarPotente poema de la mudanza y las pérdidas, y el conservarse entero. Bello!!
ResponderEliminar...cuando creía que nada dejaba de ser
ResponderEliminarque nada dejaba de estar
que nadie dejaba...
Gracias.