Descuido.
Esa tarde de nubes
con cisnes derramando vapores furiosos.
Un verano perdido de sal, amapolas y brindis
no era mía la estación
apenas un plumaje
sin
sabor a dioses
con sabor a adioses.
© Alicia Corrado Mélin
Fuerte y enorme poema.
ResponderEliminarNostálgico y bello!Mariel
ResponderEliminarMe gusta ese juego....a dioses y adioses.
ResponderEliminarBuen poema
Abrazo
Alicia Borgogno
hermoso Alicia!
ResponderEliminarRotundo, sentido y con un buen juego de palabras en el final, logrado desde la sencillez y brevedad.
ResponderEliminarUn abrazo
Betty