Y este pinar se mira en aquel
otro, allá en Gesell, donde luché con tu recuerdo.
Si creyese en el alma y si el
alma tuviese caderas, diría que en ese combate se me quedó descaderada, como
Jacob vencedor en su lucha con Dios.
Vos pasaste, los pinares quedan.
© Paulina
Juszko
UN CIERRE MUY SABIO !
ResponderEliminarEs verdad lo mas importante queda, y es el entorno amable...
ResponderEliminarEs verdad, lo mas importante queda...
ResponderEliminarNO SE OLVIDA EL POEMA DE LO QUE MÁS DESEAS!...
ResponderEliminarES UN MUY BUEN POEMA DONDE ESTÁ LO IMPOSIBLE DE OLVIDAR!.. GRACIAS POR COMPARTIRLO ...
LIDIA CC.