Siete
Marcan las punzadas
una línea
entre dos
surcos
de piel.
Como un alfiler destruyen
las voces
cuando el
dolor propone
una mirada torva.
Y en el arco de las cejas
un signo se
repliega
en el gemir.
© Griselda Rulfo
y me sigue gustando mucho este poema. susana zazzetti.
ResponderEliminarMuy bueno Griselda. Pienso que la agresión fue con una flecha porque al final hizo vibrar el arco para dibujar la cara del dolor. Besos Isabel Llorca Bosco
ResponderEliminarGriselda:
ResponderEliminarMuy bueno tu poema! realmente estás dando muy buenas punzadas poéticas! te felicito! Abrazos
Asombra y duele.
ResponderEliminarAbrazos, Marta
Duro y tan bello como un diamante, abrazo Griselda...
ResponderEliminarEl dolor nos silencia, pero también nos interroga, y la poeta responde con su poema como una herida abierta. Connotación sagrada del sufrimiento, que recibe "siete" punzadas y escribe con su cuerpo. Me gustó mucho. Un beso grande. Adriana Maggio
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ResponderEliminarIntenso, como vos.
Lily Chavez
qué buen cierre para un excelente poema Abrazotes
ResponderEliminarAmiga, este poema es muy gráfico respecto a una situación de dolor que puede ser tanto físico como emocional, pues no solo lo describes con las palabras sino que el,lector tb. visualiza el dolor en el lenguaje corporal, en el piel, en el ceño...
ResponderEliminarUn gran abrazo
Juany Rojas