Poema de Sonia Rabinovich
A Malka,mi bisabuela
No soy ella
pero en ella fue mi sangre
en su manera de triturar los días.
No soy ella pero la mano
se deja navegar en mares
que entraron y salieron por ojos neblinosos
cegueras repentinas, más que eso,
por mundos invisiblemente apáticos .
Para qué escribir sombras?
Qué luz recupero en cada letra?
Qué sostengo desde la palabra ?
A quién salvo?
-A las dos– me dice
sobre el barco no podía escribir
todo se balanceaba y se hundía
nada era cierto o posible,
¿Qué gano con ir hacia tierras que nunca ví
y saberme parte de aquel desgarro?
Irse de uno para resistir
desde el papel mojado
que sigue chorreando mundos incomprensibles.
Quién me dice – escríbelo, dibújame la cara abierta
a voces desconocidas-
Quién me empuja los dedos
los arrastra sobre esta hoja
que recibe la mudez ,
fragmentos de una proa,
de un sótano oscurísimo.
Rueda la cabeza de una muñeca
sobre cubierta y cae al mar
Madre, mamushka- el grito de la niña
¿de la niña?
Malka se quita el pañuelo de la cabeza
y envuelve la humedad de aquel rostro azul
vestido de su hermana,
crecido el cabello
que decidió su suerte fuera de Kiev
siendo otro de sí
para poder ser.
© Sonia Rabinovich
Etiquetas: Sonia Rabinovich
7 comentarios:
m envuelve tu poema, que sostiene con ternura, nostalgia y amor, un recuerdo que dejó su marca.susana zazzetti
Cuanto de nuestros antepasados hay en nosotros...esa rueda que gira y marca nuestro ADN Un bello poema con la pausa de lo nostálgico
me gusta, me gusta, me parece estar escuchando tu voz pronunciando la belleza
Lily Chavez
Sonia tan actual este poema ''ser otro de si/para poder ser'', alguna vez lo escuché de tu voz, bellísimo. marta comelli
Tu poesía siempre me trae dulzura, emoción, historia. Me encanta leerte
Lily Chavez
Un gran poema y enorme sentimiento.
Profundo y bello!
Besosssssss
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