Valparaíso
Sonoro y naranja
-mar crespo de flores heladas sumergidas-
el puerto vivo alitera.
La ciudad pende
engarza cruces, cúpulas
se sale de sí
replica
la oscura paciencia de un Sísifo urbano:
sutura rotura
rehila rotula
troquela:
setenta balcones y amarantos amarillos brotados
donde una mujer y un hombre y alguien más
sacuden su alfombra persa,
salen a volar.
© Marta Ortiz
Buena descripción poética de Valparaíso. Abrazo, Inés.
ResponderEliminarBello poema, Marta, abrazos!!!
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ResponderEliminarHermosa forma de plasmar un recuerdo, un lugar sin perder el detalle, el momento vivido.
Lograste con el poema que uno sienta Valparaíso. Abrazo
ResponderEliminarBello retrato de una ciudad encantadora!
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