LAS SEIS DE LA MAÑANA
Escribo sentada frente a la ventana
y tu recuerdo viene a enloquecer a mis fantasmas
Me aferro
a ese límite sin espacio
que deja la sombra
En un tiempo
me adornaba con piedras preciosas
y me vestía de azul
como las sureñas de Portugal
Tengo otra voz
que susurra en el aliento
detrás de esta bruma que nos une
Una voz que pelea
con las palabras que escribo
mientras intento esperarte
© Gloria Oscares
Esto del sentir y el darse cuenta , permite que el poeta pueda discernir, ver, ademas de sentir.
ResponderEliminargenia Gloria!!
que hermoso poema Gloria!
ResponderEliminarMuy bello. Cariños.
ResponderEliminarMe gustó mucho. El remate deja pensando: "intento esperarte" habla de un intento, pero certifica que no existe la convicción de esperar. Un beso. Adriana Maggio
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