Fue un juego inconcluso. Una temible exposición de retratos.
Los días comen días en su organismo lógico. Los niños se
balancean en el cuerpo de un hombre caleidoscopio.
Las rosas y las magnolias no responden al llamado de la tiza
que marca límites.
Las naciones de papel son eternas vigías de las naciones de
piedra.
Voy con todas las fuerzas hacia la hoguera del temblor, el
ojo del universo me observa, no parpadea, se mueve a espaldas de lo que muta.
© Víctor Hugo Valledor
Con agrado leo este texto, Víctor, "las naciones de papel...", "hacia la hoguera del temblor...".
ResponderEliminarSaludo grande.
Rolando
*
Disfruté de este ovillo de imágenes contundentes y deslumbrates. Felicitaciones.
ResponderEliminarClaudio Simiz
Fantásticas imágenes en un racimo de palabras que te atrapan
ResponderEliminarVíctor que hermoso hilado de imágenes... leerte siempre es un disfrute.
ResponderEliminarcariños
Cynthia Rascovsky.
Poema desenredado en su firmeza y su asombro. Felicidades.
ResponderEliminarEste poema me cautivó por varias imágenes. Me quedo pensando en: "El ojo del universo me observa, no parpadea, vive a espaldas de lo que muta..."
ResponderEliminarSituaciones límite que a veces la vida nos pone delante y debemos enfrentar, caminar hacia adelante como sea y.. el universo sigue ahí, impávido, inmutable.
Saludos
María julia Druille
ResponderEliminar"el ojo de universo", "la hoguera del temblor¨", la fascinación por la hipérbole, me encantan, son imágenes potentes.
gracias