NADA MÁS, SI
PUDIERA
Si yo pudiera dejar de ser silencios,
sombras inconmovibles, frustraciones.
Ser amor verdadero, un anhelo posible,
una llovizna cierta,
tan ligera y frecuente como una bendición.
Ser estrella en la noche
la luz en el
misterio,
desanclar la impotencia para hallar
esa serena y honda, paz que habita el espíritu.
Si pudiera crecer fuera de los abismos,
de las cortas moradas
y los largos destierros.
Acunarme en la libre certeza de ser yo,
único, irrepetible,
distinto y sin embargo, parecido a mi gente.
Sin grillos en las manos
para poder abrir los abrazos prometidos.
Avanzar sin cadenas que retengan el alma.
Y así pulsar mi sangre,
amistosa y abierta a la esperanza.
Entonces---, miraría,
con los ojos del pecho hacia el asombro
para encontrar la luz y el camino a la vida.
© Antonio Cristóbal Pourrere
Soberbio, halagar este poema, es quedarse sin palabras. Gracias por esta esperanza que nos traza su camino.
ResponderEliminar" dejar de ser silencio", llevo años con esta intensión, pero lo bueno es llenrlo de palabras, llenarlo de asombros, así, se abrirá ala esperanza, aunque insista en habitarnos. un bellísimo poema, leído,releído. abracito. susdana zazzetti.
ResponderEliminarEntonces miraría con los ojos del pecho... excelente esa mirada abre hacia el amor.
ResponderEliminarAbrazos
Elisabet
Tu poema hace soñar todos esos anhelos..
ResponderEliminargracias!..abrazos
S.Roberts
Me encanta este poema, escrito en un vibrato que mantiene el alma en vilo.
ResponderEliminarEnorme sentimiento entrega este maravilloso poema.
ResponderEliminarAbrir las ventanas del alma para recibir el calor de tu poema, es todo un deleite amigo.
ResponderEliminarMe deja pensando y transmutada. En eco me acuno en tus silencios. Abrazo mariposa. Mary Acosta