Marta Zabaleta comparte JUANA DE IBARBOUROU
La higuera
Porque es áspera y
fea,
porque todas sus ramas son grises,
yo le tengo piedad a la higuera.
En mi quinta hay cien árboles bellos,
ciruelos redondos,
limoneros rectos
y naranjos de brotes lustrosos.
En las primaveras,
todos ellos se cubren de flores
en torno a la higuera.
Y la pobre parece tan triste
con sus gajos torcidos que nunca
de apretados capullos se viste...
Por eso,
cada vez que yo paso a su lado,
digo, procurando
hacer dulce y alegre mi acento:
«Es la higuera el más bello
de los árboles todos del huerto».
Si ella escucha,
si comprende el idioma en que hablo,
¡qué dulzura tan honda hará nido
en su alma sensible de árbol!
Y tal vez, a la noche,
cuando el viento abanique su copa,
embriagada de gozo le cuente:
¡Hoy a mí me dijeron hermosa!
JUANA DE IBARBOUROU
entrada de Gustavo Tisocco a las
10:24
5 comentarios:
Hermoso y conmovedor poema, que embellece lo que es aparentemente feo. Gracias, pues su autora , sin duda es una de las grandes de América .Este poema lo leía frecuentemente en mi adolescencia.
Un abrazo
Juany Rojas
Este poema en otros días lo leía repetidas veces, hoy me gustó encontrarme con le higuera de Juana de América, gracias por compartirlo
Betty
me trae el recuerdo de mi escuela secundaria y de mi profesora de literatura. Fue el despertar de mi compasión por todo aquello que no es agradable a los ojos pero que brilla por dentro. Gracias
Querido Gustavo,
para celebrar el cumpleaños de tu maravilloso y generoso trabajo, te enviée uno de los poemas que más me impactó en mi niñez. De eso hacen más 70 años. Y que contribuyó a que me volviera consciente de los prejuicios , y a que muy poco después, me conviertiera en una comprometida feminista como lo soy hasta hoy.
NOTA BENE: para lxs másjávenxs: nos lo enseñó en la escuela Lainez de Bouquet,Dpto Belgrano, Pcia. de Santa Fe, mi maestra primaria, que era al mismo tiempo mi mamá..., y quien casi cada mañana cuando me hacía la trenzas para ir a a escuela, me decía:
-' Por Dios que eres fea, Marta.!! Y yo que quería tener una hija alta,rubia, y de piernas largas'...mientras me tironeaba el pelo de lo lindo.
Ojalá esa cultura paternalista y cruel del Litoral en que me crié haya cambiado mucho.
Abrazos amistosos, y muchas gracias por tu atención de pu8blicarlo,
Marta, desde londres
Felicitaciones por traer este precioso poema de Juana de Ibarbourou. Conmovedor tu relato al respecto.
Elisa Dejistani
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