Canción 7
Basta un balcón sobre el río
y unos caballos paciendo
para viajar noche y día
sin moverse.
Los caballos están fijos
y el río está quieto siempre.
Sólo, a veces,
pasa un barco que lo inquieta,
y el aire, para moverse
un poco y trabajar algo,
cambia un caballo de sitio,
y allí lo deja.
Y el hombre del balcón vuelve,
mientras, de un largo viaje,
sin moverse
Rafael Alberti, un gran poeta, muy buen poema el elegido.
ResponderEliminarSaludos
Anahí Duzevich Bezoz
Rafael Alberti, un gran poeta, muy buen poema el elegido.
ResponderEliminarSaludos
Anahí Duzevich Bezoz
Gracias por el gran Rafael Alberti,saludos
ResponderEliminarSilvia Loustau
Gracias Humberto por el poeta y el poema.
ResponderEliminarAbrazo
Desde el balcón, viajar, sin moverse.
ResponderEliminarExcelente elección.
Maria Cristina Fervier