El retrato me mira y dice que fui feliz
En este cuarto sin espejos, perdí la forma de mi rostro,
Me acerco para aprenderme
La foto me arrastra:
- ¡ayer! (apunta mi brújula) -
es tan fácil cambiar el rumbo cuando uno no tiene adonde ir
Adivino que el reflejo hierba de tus ojos viene de algún mar
apretado de sol
y en los míos hay una luna opaca,
como los días
en que decimos –“mañana va a llover”
© Alejandra Leonor Parra
Muy bueno.Saludos, Marta
ResponderEliminarHace falta mirarse para descubrirnos.
ResponderEliminarUn abrazo
Muy bueno, me encantó Ale y está excelentemente acompañado con la imagen.
ResponderEliminarLily Chavez
ResponderEliminarEs una sorpresa que descubramos al final que en realidad en el cuadro hay dos, ella, y un él que son distintos diametralmente y por consiguiente sugiere que han roto y en ese lugar sin espejos (recuerdos?)ella se encuentra ahora, redescubriéndose.
Buen poema
felicitaciones