Ausente
Ella fue siempre una tristeza oscura
un mustio anochecer
un laberinto
la niebla sobre el mediodía.
Recuerdo con cautela
su genio de metal
su voz de arma de fuego.
Su abrazo ausente
su lejana sombra.
Sin embargo,
nos parecemos mucho.
Y en ciertas noches,
raras noches,
pienso en ella.
© Olga Liliana Reinoso
Su voz de arma de fuego, esa y cada una de tus expresiones me dibujaron el ser del que hablas. Supongo a la madre que se fue hace poco, supongo a la que se parece a vos, a la pensamos en las noches raras. Un abrazo Olga, bellísimo poema
ResponderEliminarLily Chavez
"su abrazo ausente" lo representa todo. dolor, amor, melancolía, y una honda belleza. susana zazzetti.
ResponderEliminarEsas "ciertas" "raras" noches en que la pienso también yo!!!! Gracias poeta!
ResponderEliminarprofundo. Muy tuyo.
ResponderEliminarte quiero!!
Un poema que sugiere la ausencia de alguien muy cercano y lejano a la vez, pero que sin embargo dejó una marca indeleble.
ResponderEliminarUn abrazo
Juany Rojas
¡Bello poema!abrazos
ResponderEliminarSuscribo a lo que dice Juany.Es un poema hermoso.
ResponderEliminarGran poema, Olga. No hay culpa en ser "nocturna". Lo poético brilla en la primera estrofa. Pero en la segunda pesa mucho y en forma polisémica la palabra "RARAS!. Un abrazo Isabel Llorca Bosco
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