Poema de María Rosa León
Pobreza de solemnidad
"¡Qué pobreza la mía, no tener
un
rayo de luz entre los dedos!"
Federico García Lorca
"La casa de Bernarda Alba"
¡Qué pobreza la mía!
No poder leer
un solo poema
en la más ínfima
gota de rocío.
¡Qué pobreza la mía!
© María Rosa León
entrada de Gustavo Tisocco a las
12:44
21 comentarios:
Te acompaño en esa soledad. Luego, somos dos solas. No lo estamos tanto. Bravo María Rosa!! La poesía es nuestra compañera!
Celina
¡Hermoso!
Maria mientas tengamos poesía desconoceremos la pobreza
maria elena tolosa
digo riqueza: poder escribir diciendo en tan poco tanto!!! susana zazzetti.
No hay pobreza aquí, ni en la palabra, ni en el sentimiento, ni siquiera en el acto de vivir. Hermoso poema
La desazón que nos deja, no poder ver lo bello para decirlo.
Muy buen poema.
Abrazo
Elisabet
Mil gracias, Susana, Ma. Elena, Liliana y Celina por sus palabras y su afecto.
Un beso grande para todas y cada una
María Rosa Leon
No hay pobreza en la mirada de la poeta, todo lo contrario. Abrazo de Marta Ortiz
Que bueno Maria Rosa! Cariños, Dolores Pombo
Yo diría que tu riqueza con la palabra es mucha.
Besosssssssss
No lo pudiste leer pero lo escribiste. Abrazo
Lo has escrito ¡Bravo!
pobre es quién no puede expresarse como te has expresado, con esa voz tremenda y profunda que delata a tremenda poeta!!! gracias por compartirte y compartirlo, francisco
¡Gracias, Francisco, por tu presencia, siempre llena de afecto y por la generosidad de tus comentarios.
Un beso grande
María Rosa León
¡Gracias, Elisabet, Dolores, Mónica, Milagros, Teresa, por la generosidad de su tiempo de leerme y comentarme!
Un beso grande para todas
María Rosa León
qué riqueza para decir tanto con tan poco!
abrazo
Muy buenísimo, felicitaciones Alicia.
Besos Alicora.
una pobreza que delata tanta riqueza
en apretada síntesis. Gracias
Abrazos
Elisa Dejistani
Mil gracias, Elisa, Aliciora, y Claudia, por sus palabras y su afectyo.
Un beso grande para todas
María Rosa León
María Rosa, que pobreza tan hermosa. Es tu riqueza la que llega a mi puerta a cada rato y me pide reaccione y abra.
Gracias.
Sonia Quevedo
Muchas gracias, Sonia, por tus palabras y por tu afecto.
Un beso grande
María Rosa León
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