EL VUELO
Así como en Adán
todos mueren, así también
en Cristo todos tendrán vida.
Corintios 15. 22
Cuando me escurro a lo corruptible
de la absurda realidad
la que nos somete al juego eterno
la poesía transforma la caída
en vuelo.
Un hilo dorado incandescente
me reúne
adámico aún
con el misterio precioso del Árbol.
No se nos desterró del todo
de aquello
aquello que llamamos Paraíso.
El hilo se abre
la esperanza habla
desde más allá del túnel inconsciente de
uno mismo habla
invita a recordar
y hay luz en la ciénaga aparente
de la vida
hay luz de la energía del amor.
Siempre es un placer leerte, Ceci, un abrazo
ResponderEliminarSilvia Loustau
La poesía nos salva, es eso.
ResponderEliminarBesos
buen poema
ResponderEliminarW.M.
Muchas gracias a los tres. Un abrazo. Cecilia
ResponderEliminarEn el túnel más oscuro aparece la luz.
ResponderEliminarMuy bello
Graciela N Barbero