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3/9/14

Poema de Susana Szwarc

  
El desorden de las relaciones de propiedad
                                                    a Guada y José Kózer 


Y yo, volví al hospital.

En el largo pasillo repleto esperaba
-esperaba de pie y te leía-.

En un solo  movimiento: girar la cabeza  la página
un dedo de la mano izquierda,
los anteojos de leer cayeron
-sobre el mosaico-.
Cada pedacito de vidrio mostraba  una garza
 sin sombra, que empezó a recorrer el pasillo con sus zancos.
De lejos la vi apoyar su lomo
en el vendaje de una pierna. Despacio
 me acerqué.
 Es mi garza decía - un poco
a los tumbos-  pero cada uno deseaba a la  sanadora.
Es mía, insistí, riéndome
por las cosquillas que me hacía  -garza- en su  desorden.

Salieron los médicos al pasillo -salieron por el revuelo-
 y llamaron: Garzas.
Nos hicimos
-sombra-. 



© Susana Szwarc   

12 comentarios:

  1. Hay momentos confusos en que la imaginación juega un papel decisivo , sin duda las garzas transitaban el pasillo

    maria elena tolosa

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  2. Quien lee escapa al tedio y desorden hospitalario por el tobogán mágico de los cristales rotos que sostienen en sus trocitos la imagen leída, la garza multiplicada. Bellísimo, abrazo Susana. Marta Ortiz

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  3. me encantó, pero me ha demolido hasta los huesos!!!
    gracias por compartirlo, francisco

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  4. Maravilloso juego entre la concia plena y lo inconsciente. Un buen poema.

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  5. Muy bueno, disfruté el poema, gracias.

    Lily Chavez

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  6. Agradezco muchísimo que hayan leído el poema y hayan dicho.

    Besos!

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  7. esa atmósfera surreal tiene un encanto notorio, muy bien
    Susy
    con admiración
    Walter

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  8. muy bueno
    saludos
    Anahí Duzevich Bezoz

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  9. Coincido con quien habló de la atmósfera
    del texto.Me quedo pensando en unos anteojos de leer que necesitan romperse para ser aves...

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