COMO EL SIMURG
Uno va sin destino
por ahí
sin amor
a la aventura
como sin rumbo cierto
apenas sí quebradas las alas,
expandidas las garras
(al
acecho)
Simurg a la deriva;
renaciendo en el vasto desierto
de entre la ceniza todavía iluminada,
intentando la altura.
Uno va rezarciéndose
así, sin convicción
expuesto al avatar
reconociendo el giro de los vientos
haciéndose parada tras caída
a la ruta
(otra vez)
al vuelo…
al
fuego!
A tientas bajo el sol
© Walter Mondragón
y a veces ( seguro) pasa. adhiero a tu poética. susana zazzetti.
ResponderEliminarbello y fantástico!!! gracias por compartirlo, francisco
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