jugábamos a la ronda.
al gallito ciego.
saltábamos la cuerda
en el patio.
en los recreos.
escuchábamos una infancia de lluvia
los brazos bajo la nuca
como si nada.
sin saber
que después
manotazos inesperados
iban a llenarnos de estrías
el alma.
© Susana Zazzetti
Susana, me encantó leerte y esa real vida tan bien dibujada en versos.
ResponderEliminarAbrazos.
"escuchábamos una infancia de lluvia" :hermoso
ResponderEliminarsaludos
Anahí d.Bezoz
Muy emotivo Susana, esa infancia feliz ,despreocupada y después todo se derrumba sin saber porqué
ResponderEliminarabrazo
maria elena tolosa
Por supuestro Susana cada estria marca el camino de algún aprendizage Un poema profundo!
ResponderEliminarSusana, leer este poema con su calidez y su rudeza tan bien enfrentadas me deja con la hermosa sensación de la palabra bien dicha que se yergue sobre las estrías del alma..
ResponderEliminarUn abracito
Betty
Hermoso poema que describe con exactitud el devenir de nuestras vidas.
ResponderEliminarSusana:
ResponderEliminarExcelente el clima que genera el poema, muy buenas metáforas y sorprendente el final. Me gustó mucho.Felicitaciones como siempre!
Un poema real, dicho como vos sabés hacerlo. Lindo leerte.
ResponderEliminarUn abrazo
Lily Chavez
Susana algunos manotazos inesperados
ResponderEliminarlos esquivamos, otros no,son las leyes universales del azar, pero
toda esa infancia gloriosa que con
tanta maestría dibujás, es de una belleza radiante por la dulzura que guarda la memoria
Espléndido
Ignacio
Las estrías del alma...cuánto más profundas que las del cuerpo, Susana! Y no hay crema que las borre...
ResponderEliminar... alguien podría pensar "arrugas" ... pero no ... es "estrías" ... el insustituible valor de cada palabra !!! ... Me encantó
ResponderEliminarMuchas gracias, Susana
Un abrazo
Lía Miersch
Tus poemas, Susana, que toman unas pocas cosas simples y esenciales parecen brotar "como si nada".Pero tu saber logra un ámbito lúdico y placentero, unas notas que han quedado en el alma, marcada por esos golpes de la adultez. Y empleás la palabra "manotazos¨
ResponderEliminarpara no salir del todo del ámbito del juego aquel, tan distinto. Un abrazo Isabel Llorca Bosco
Susana, querida ese último verso es impactante.
ResponderEliminarBesosssssss
por esa infancia de lluvia...gracias!
ResponderEliminarmaria del mar
"Las estrías del alma" cuentan con poemas como el tuyo. Y se alivian "como si nada"
ResponderEliminarFelicidades Su!!
Cecilia Ortiz
ResponderEliminarUn poema que se yergue desde lo gestual y abreva en el arca rilkeana de la infancia.
Tierno y emotivo en su base, como un niño dormido que va creciendo hasta el "manotazo" final, cuando despierta y ya es adulto.
Felicitaciones
Elisa Dejistani
Como dice Ivana: "Felicitaciones como siempre"
ResponderEliminarExcelente manera de expresar, de recorrer y explotar ne las emociones.
ResponderEliminarbesos muchos.
Cariños
Cynthia Rascovsky
Una infancia vestida de recuerdos
ResponderEliminarue llena el alma!!!!!!María Luisa Márquez
Poema lleno de momentos bellos y un dejo de tristeza.
ResponderEliminarLindo poema,"los brazos bajo la nuca/como si nada"...la infancia y la inocencia...y después las estrías en el alma. Abrazos
ResponderEliminarRosa Lía
"El niño es padre del hombre!, dijo Wordsworth. Y somos eso: recuerdos hilados en poesía. Abrazo. PAOLANTONIO
ResponderEliminarPrecioso poema .Conmueve y nos deja tantear esas estías que todos llevamos a cuestas . Un abrazo
ResponderEliminarA fuerza de ser vos, sentimos que esa niña somos todos los que leemos el poema. Solo que tuya es la palabra justa, pensada.
ResponderEliminarPero lo que más seduce es ese lugar profundo de tu ser en el que te sentaste a escribirlo. Como toda tu poesía, Susy.
Susana Giraudo
Ternura de la infancia, bajo la lluvia, y estrías en el alma que se gestan al crecer. Impecable.
ResponderEliminarAbrazos
Maria Cristina Fervier