Poema infinito
La ansiedad de tu ausencia
respira en todas mis fatigas.
Transcurren los años con láminas de seda,
el pensamiento que indaga
el lejano páramo del viento.
La profana ceguera
que te nombra
con las túnicas secas donde oculto los miedos,
en la agónica glorieta del destino.
Desde siempre me habitan tus colmenas ,
los tilos celestes que atizan el pasado
y el bullicio de los pasos
que corren
atrás de los cristales.
Te debo la ternura de la entrega
la piel terrestre de la hondura.
El disturbio de mi sombra.
Hiere el silencio de las noches
la página que cierro
con el cultivo de estas flores
que ofrezco a las caricias del futuro .
© Norberto Barleand
celebro esas flores,caricias del futuro!1abrazo,amigo!
ResponderEliminarmaria el mar
ResponderEliminarBello y nostálgico poema, Norberto.
Un abrazo,
Alicia Márquez
bellisímo poema con un vocablo exquisito. Enhorabuena.
ResponderEliminarJORGE PABLO MORENO.
Me encantó tu poema ,Norberto, de una exquisita belleza y sensibilidad, con imágenes semejantes a la delicadeza y detalles de una pintura japonesa: "los años con láminas de seda", "las túnicas secas donde oculto los miedos", "tilos celestes que atizan el pasado".
ResponderEliminarUn gran cariño
Beatriz Minichillo
Disfruté todo; la ilustración y cada verso del poema con su imagen atractiva.
ResponderEliminarAbrazo
Betty