LA SIMIENTE
“…lo que el Espíritu produce es amor, alegría, paz,
paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad
humildad y dominio propio. No hay ninguna ley
que condene cosas como éstas”.
Gálatas 5- 22,23
Se abren nuevos territorios
en la Luz de Cristo Jesús.
Gorjea en los surcos
regados por la lluvia del universo
la simiente de un ciclo en adviento.
En ella
el amor germina hacia el Divino Plan
en este mundo de llagas y de cantos.
© Cecilia Glanzmann
Gracias, Gustavo, por la imagen que lo ilustra tan significativamente y por publicar este poema. Abrazo de luz. Cecilia
ResponderEliminarCecilia, tu poema me parece un canto de fe y esperanza. Felicidades.
ResponderEliminarCARMEN AMATO
Hermoso el epígrafe (tal vez unas de las líneas más significativas del Nuevo Testamento). Hermoso el poema que espera una venida en un mundo que comparte júbilo y dolor, como Cristo, por ser humano. Un abrazo, Cecilia. Isabel Llorca Bosco
ResponderEliminarOjalá... todos estamos a la espera
ResponderEliminarDavid Sorbille dijo...
ResponderEliminarQuerida Cecilia: en pocos versos toda la luz de tu inspiraciòn! Excelente! Un abrazo
ResponderEliminarQuerida Cecilia,
tu espíritu luminoso queda impreso en este gran poema que nos entregas, con un remate esperanzador. Te felicito.
Cariños
Elisa Dejistani
Gracias a cada uno, por los comentarios que han escrito. Abrazo de luz. Cecilia
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