CAÍDA DE ESTACIONES
Hubo un tiempo
En que no teníamos nombre
Corredor natural de ese tiempo
Era nuestra risa
La tierra entraba por los pies
Y llegando a la boca era agua
Más tarde se hizo temprano
Y una invasión de voces calló
Salpicado de telarañas
El aire en el aire
Y el pulmón quieto
Y la mirada quebrada
La salida una luz opaca
Para pedir perdón por no tener más
Hubo un tiempo
Cuando bastaba con el nombre
Tres cruces podían el desgarro
De un cielo demasiado extenso.
© Yanina Audisio
me impactó tu estilo, tanto y tanta belleza. susana zazzetti.
ResponderEliminarpoeta, me encanto "hubo un tiempo cuando bastaba con el nombre", saludos
ResponderEliminarpatricia corrales
Yanina:
ResponderEliminarHola! Qué alegría leerte acá. Obviamente sos una poeta contemporánea. Muy bueno tu poema, empezó con mucha fuerza, todo el poema tiene un hilo conductor muy bello, con imágenes geniales, hasta desembocar, por supuesto, en un final, mucho mas fuerte. UN desgarro en aquella inmensidad. Bravo!
Poema para meditar, me gustó mucho
ResponderEliminarmaria elena tolosa
Hola Yanina: tu poema nombra una época dorada, de unidad, de naturalidad, de anonimato en el ser, de goce. Las imágenes son muy logradas y fluyen sin esfuerzo("La tierra entraba por los pies/Y llegando a la boca era agua")Luego entra el tiempo, "se hizo temprano" y el capital, "pedir perdón por no tener más".La repetición de ese "bastaba con el nombre" crea un remanso que contrasta con el "desgarro" final.Ese "cielo demasiado extenso" denota una inmensidad que nos sumerge en la nostalgia. Lo disfruté mucho Irene Marks
ResponderEliminarGracias por sus lecturas y comentarios! Los poetas están de pie. Salud!
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