desde mi arena natural decaigo
como ausente del nido o del verde
pájara o paisaje o artilugio
para devenir
polvo que late
desde mi arena natural
no canto ni rezo ni discurro
espero el suceso
el rostro que reúna a la hembra con su especie
desde mi arena natural
raspo
(me oscurece este mar
su hondura)
desde mi arena natural me esparzo
caracol o casa que me llevo
a cuestas
(playa en donde el agua
se vuelve a correr hacia su océano)
© Ana Guillot
ResponderEliminarEse espléndido "polvo que late" no acepta ser un mero artilugio. Ana Guillot ha alcanzado ya una madurez y altura poéticas que le permiten ahondar su palabra, no meramente en tierra o en aire, sino en esas arenas naturales donde quizás se presienta la raíz del Ser. El abrazo y la admiración de Jorge Ariel Madrazo.
Mi querido Jorge Ariel! Recién hoy leo tu comentario, que me honra; ya sabés cuánto te admiro. muchas gracias y mi abrazo!! Ana
ResponderEliminarEstupendo poema, cargado de connotación.
ResponderEliminarYa tener la admiración del Maestro Jorge Madrazo es lo más...pero igual voy a decir que me encantó el poema y que es siempre un gusto leerte.
ResponderEliminarLily Chavez
Sutilmente sensual HERMOSO POEMA!!!
ResponderEliminarexcavo el grito con mis manos...GENIALMENTE SENSUAL !!!
ResponderEliminarMi admiración unida a la de Jorge. Bravo!
ResponderEliminarPolvo que late, una maravilla!
ResponderEliminarBesosss
gracias a todos y a cada uno, de verdad!!! ana
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