Violetas las
lilas
reventando en
la mata
no me olvides en el jardín
( no
no me olvides )
la distancia
tiñendo ojeras
la noche
mariposa aleteando
tu ausencia
bordes de la
pena
violeta
la blusa
que ama mi hija Valentina
las manos del
nieto
pintando dragones
(dragones que
existen
más allá de los sueños)
violetas los pensamientos
en los canteros
de la infancia
manos ásperas
tomándome las mías
el abuelo
sus no me olvides en el jardín
(no
no me olvides)
violeta el
color del ocaso
de este ocaso
que me lleva
me lleva
hacia otra muerte
Más de la autora en la primer parte del blog:
http://mispoetascontemporaneos.blogspot.com.ar/search?q=anamar%C3%ADa+mayol
Hermoso, violetas de no me olvides.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bellísimo poema , gracias poeta.
ResponderEliminarLily Chavez
Muy hermoso tu poema Anamaría!!!
ResponderEliminarY sabes una cosa? el violeta no se deja fotografiar.
ResponderEliminarinevitable recalar en ese otra muerte real y sin sentido, aunque por otra parte: ¿Qué es la muerte?
¡No existe! pues cuando está ella no estamos nosotros y cuando nosotros no estamos ella no está.
Gracias
Walter Mondragón
P.D. estupenda ilustración.
Muy hermoso, Ana María. Besos.
ResponderEliminarMuy hermoso poema: las y los nomeolvides, el color violeta y algunos recuerdos entrañables que se tiñen de ese color. Gracias y abrazo, Inés Legarreta
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