O J O P E R
E G R I N O
el parpadeo
purifica
limpia de
pasados
guía a lo
más íntimo
donde el
huésped
aguarda
en la alta
frente
un manantial
sudores confusión
inquietud
de los cuerpos
el parpadeo
purifica
miedos heridas
tormentos
de la especie
viaja la
conciencia
ojo peregrino
hasta que
soporte
la luz
© María
Chapp
lo muy bueno de leerte, maría, además de disfrutar de tu talento, es que tu palabra contagia con su transparencia, su luz. un gran abrazo. susana zazzetti.
ResponderEliminarMaría! Cuanto más que un ojo es ese ojo! sobre todo "en la alta frente" Bravo!!!
ResponderEliminarY Maria Chapp, a partir del movimiento automático de los párpados, del cual casi no tenemos conciencia, enarbola un poema maravilloso, profundo y pleno de sabiduría, como su mirada mágica sobre el universo.
ResponderEliminarFelicitaciones María
Ignacio
(Este comentario por algún error
salió repetido entre los comentarios a mi poema)
Buen texto, María, que ayuda a descubrir rincones...
ResponderEliminarClaudio Simiz
Siempre es hermoso leerte, tus versos son como agua donde mirarse. Beso preciosa
ResponderEliminarLily Chavez
Siempre es hermoso leerte, tus versos son como agua donde mirarse. Beso preciosa
ResponderEliminarLily Chavez
ese ojo, María, cuántas cosas vio!! almacén de visiones indiscriminadas, el parpadeo protege de la desesperanza, borra lo que no debimos ver, limpia lo residual negativo y lo devuelve al ojo vagamundo al asombro primigenio. bello, hondo, esencial, gracias por este poema. Abrazos de Marta Ortiz
ResponderEliminarEse ojo que mira es mirado y en ese mirar nos sorprendemos a nosotros mismos . Bello poema Gracias
ResponderEliminarBello poema. Ese ojo peregrino de la sabiduría y la elevación espiritual, que -por ser humano- también tiene su limitación: "hasta que soporte la luz". Hermoso. Un abrazo. Adriana Maggio
ResponderEliminarEs verdad el ojo por ser humano tiene limitaciones pero igual cuánto encierra de profundo misterio en su interior
ResponderEliminarabrazo Maria
maria elena tolosa
un ojo, que apunta como si fuera a disparar, y vé, y presiente y es certero.
ResponderEliminarbravo,saludos
Anahí Duzevich Bezoz
Profundo original y muy bueno Un placer leerte María
ResponderEliminarQuerida María,
ResponderEliminarComo ya dijera en el comentario que hice de tu libro "El Ojo Peregrino", transcribo un fragmento del mismo:...
"Una mirada abarcadora nutre el universo poético de la autora. Como una pasarela que emerge desde los ojos, la poeta nos conduce a través del parpadeo de mundos paralelos, que toman forma desde lo visceral y se proyectan hacia la vastedad del cosmos..."
Un gran abrazo y Felicitaciones!
Elisa Dejistani
El poema es excelente y claro, al menos para mi lectuia Es la viviencia de estar viajando y, como en otras ocasiones, has tenido la
ResponderEliminarbuena idea de poner la palabra "húesped" que sugiere al que habita en nosotros o al que nosotros habitamos Aquí parecería la vida, la perseverante mirada hacia el sitio amoroso.
El principio, ese parpadeo en una frase por demás poética, sin acumular palabra, despojo de dolor y resentimientos hasta la más potente luminosidadl.
. ¨Trayecto hasta que el ojo, que ha visto y leído los males de los seres humanos,
que los ha soportado , podrá soportar la contem
plación de la máxima luz
La que nos remite
a citas de los Salmos. "cuando llegaré a contemplar la luz de Tu Rostro" Y David lo decía de la faz de el Dios invisible",
inconcebible luz espiritual.
lUn beso enorme.
Isabel Llorca Bosco
Amigos: gracias por los profundos, certeros comentarios, gracias Gus por esta casa de poesía y amistad, los quiero mucho!!! María Chapp
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