Poema de Graciela Wencelblat
La
noche no cabe en sus manos
noche
llena
de
claras miradas
la
música trepaba por las piernas
desafiante
pidiendo
al amor más amor
sin
importar la hoguera.
Celebrando
el
curso ascendente
donde
explota el horizonte.
© Graciela
Wencelblat
entrada de Gustavo Tisocco a las
12:35
10 comentarios:
Graciela, estupendo poema de lo alto y lo bajo. Si explota el horizonte. lo inalcanzable se acerca hasta sus manos.Un beso Isabel Llorca Bosco
"...pidiendo al amor más amor..."
Bellísimo tu poema, Graciela.
Aplausos, bises y besos
María Rosa León
Me encantó eso de pedir al amor más amor.
Bellísimo poema.
Un abrazo,
Alicia Márquez
felicito a Gustavo por la imagen que refleja perfectamente la expansión del alma que pinta el bello poema! Abrazos, y más más poesías, Graciela!
La vida ansiosa que estalla en amor
¡Que maravilla de poema Graciela!
Gracias por esta joya
Ignacio
Una sútil sensualidad recorre este poema amoroso. Bravo.
Muy bello y delicado, Graciela. Sobre todo impacta esa explosión del horizonte, línea que refiere siempre a lo que no puede alcanzarse, y que aquí sí se alcanza, y estalla. Me gustó mucho. Un beso grande. Adriana Maggio
El amor sube y baja al compás de la música y el momento especial, bellísimo.
Abracito
Betty
Hola Graciela: en tu poema la sensualidad se vuelve sonido( "la música trepaba por las piernas")y nos lleva a la captación sensible del artista, el esplendor cósmico del que explora "el curso ascendente donde explota el horizonte" con toda la fuerza de un Eros que está "celebrando", "sin importar la hoguera", entregándose por completo.Siempre lo sentí así: quien más sufre también es quien más goza. Hermosísimo poema Irene Marks
me sonó rigurosamente bello y atrevido, atrevido de atreverse a escuchar la música y predisponer el horizonte para la explosión para darle al amor más amor!
gracias por compartirte, francisco
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