En recuerdo de nuestro querido y entrañable
Adolfo Jack Zutel, más allá de la vida, más allá de la muerte, Ángulo por
siempre…
Para Adolfo y sus mares…
Las ventanas
Las caracolas cantan
su himno estremecido,
las sirenas cabalgan
sobre olas de papel
más allá de nubes dibujadas
con líneas de versos,
esbozos con letras de
espumas y canto,
canto que crece, que
viene desde lejos,
como si fuera rueda de un molino
que trastornara días y
embolsara siglos capullos y
juguetes
como murmullo de
sonrisa que rueda y rueda
sobre una playa
escondida
En el hueco del
tiempo está la casa
de vidrios, maderas,
piedras y sueños
donde tantas veces la
música del alma
abarcó el paisaje de
sus ojos,
infinitos azules,
crepúsculos, cristales
junto a su niño
interno en vuelo de gaviotas,
y mar, y mar, y mar…,
mar que viene y va
como sus pasos
urbanos
transitando entre
nosotros
Desde otra dimensión,
puntualmente el rito
de la luz
sobre una agenda de
locuras inconclusas,
en la mesa libros,
anteojos fuera del
estuche,
hojas en blanco,
ventanas que esperan
su mirada…
© Marta
Lía Brossa
En negrita, extracto de “Posibilidad”
(pág.45) de su libro “La calle de las cinco menos cuarto” de Adolfo Zutel
Hay poemas que encierran otros, hay poemas que el mar lleva a sus adentros, lo viste con su profundidad y luego los deposita nuevamente en la costa. Cuando un poeta como Adolfo Zutel ha dado tanto, es más fácil para quienes lo quisimos dejarnos embriagar con su palabra y así poder dar más, un nuevo y bello poema.
ResponderEliminarLily Chavez
Poema homenaje con bellísimas imágenes Marta.
ResponderEliminarMe gustó mucho.
Cariños
Alicia Borgogno