FAROS
Con titilar
histriónico
centuplican
a las urbes
sus
luces citadinas.
Se
rozan evasivas.
Ensayan
un cortejo
de colosales
luciérnagas.
Son los
ojos infantiles de la noche
que juegan con la muerte
sobre el asfalto de la vida.
© Andrea Álvarez
guau andrea
ResponderEliminarmuy bueno
los ojos infantiles de la noche
desde graciela abrazo
Una muy buena forma de describir la noche en las grandes urbes , magistral poema
ResponderEliminarmaria elena tolosa
luces, luciérnagas, infantiles, vida. lleno de luz tu poema. susana zazzetti.
ResponderEliminarjuegan con la muerte sobre el asfalto de la vida, estas colosales luciérnagas; tus imágenes logran hacer poesía de la velocidad irresponsable y su contrapartida, la muerte en las rutas. Abrazo, Marta Ortiz
ResponderEliminarPrecioso, original poema.Lo gocé.
ResponderEliminarAbrazos
Marta
Me gustó mucho tu poema. Un abrazo. Gastón Sequeira
ResponderEliminarUna mirada original sobre la urbe
ResponderEliminarMe encantó tu poema, querida Andrea. Muchas veces he sido feliz mirando desde un sitio elevado esa infinita colección de luces. Gracias.
ResponderEliminarJorge Luis Estrella
Andre,
ResponderEliminarpleno de sugerencias y lecturas, las luces de tu noche cautivan al lector. Excelente,querida amiga!
Cariños, Eli
Elisa Dejistani
Grandes luces que cautivan la mirada.
ResponderEliminarBesosssss
ResponderEliminarUn poema maravilloso, lleno de metáforas y secretos.
Un abrazo,
Alicia Márquez