CON LA
MORDIDA DE LA
MUERTE
Frío de ausencia
llanto de niebla
trozo de piedra en el lugar de siempre.
Verbo desgastado con la mordida de la muerte
libro de locos
espejo
adopción de nadie.
Muere
sin abandonar la identidad
el mes de junio
la inclemencia de noches de segunda.
Cuatro hilos detienen la vida y cuatro purgatorios
destierra a Pablo al territorio prometido
con la certeza que regresará desnudo.
Un barco de vela soporta el mascarón oscuro
fuerza la sal
el mar de adentro
la torre de babel
la punta de coral incandescente.
Escribe a veces la historia equivocada
en medio del frío de las escamas.
Con ojo helado
vigila la ciudad de los fantasmas
el aro
sin punto de partida.
© Roberto
Reséndiz Carmona
Hola Roberto: "la muerte" da el ritmo de este poema, que nos lleva de la mano por los distintos paisajes, los efectos del final, en especial"Frío de ausencia" provocado por "la mordida". Me pareció muy logrado ese término "mordida", por instantáneo,y admeás por irremediable.La referencia al "mascarón de proa" y a "Pablo" nos remite al gran poeta chileno. O así lo entendí . El final nos habla de "el aro sin punto de partida", lo cíclico de la muerte y la vida, la imposibilidad de aferrarnos a los momentos. Profundidad e imágenes logradísimas Irene Marks
ResponderEliminarRoberto:
ResponderEliminarEse irse que se muestra al transcurrir el poema, se da justo al fin, cuando muerte y vida más la inclemencia de las noches, escribe la historia equivocada sin punto de partida.
Gran poema.