Poema de Elena Cabrejas
POSEER
La indispensable locura
instalada en el hondo callejón de los pensamientos.
La avidez del fuego
que incendie la piel desde adentro.
Los brazos extendidos -como el eterno crucificado-
abarcando todos los caminos del amor.
La virginidad del rocío
sediento del follaje en cada despertar.
La luz que sobrevive de la infancia
aún abierta en los ojos.
Sólo entonces podremos existir.
© ELENA CABREJAS
7 comentarios:
hermosisimo poema ,un maravilla ,un abrazo Marizel Estonllo
Cuánta belleza , la virginidad del rocio , con ello lo haces incorruptible , me gustó mucho el poema
maria elena tolosa
Sutil. Bello.
Bravo!!
Suavidad en cada palabra para este hermoso poema, felicitaciones!
Un cariño
Alicia Corrado Mélin
Poema-consejo visceral y potente. Me gustó muchísimo. Un abrazo.
Jorge Luis Estrella
Esa luz uqe nos permite vivir.
!hermoso!
Besossssssss
GRACIAS A TODOS LOS POETAS TAN GENEROSOS SIEMPRE
Y A GUSTAVO TISOCCO, POR SU PERSISTENCIA, CALIDEZ Y SUS HERMOSAS ILUSTRACIONES Y POR SER TAN BUEN POETA. ELENA CABREJAS
13 de Setiembre de 2013 16,35
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